Tener una temperatura agradable y acogedora en el hogar hará que las personas que habitan en ella se sientan mucho mejor y puedan disfrutar de una vida confortable, sobre todo en épocas de frío. En este sentido, contar con unos buenos aislantes térmicos conseguiremos alcanzar la temperatura deseada en nuestra vivienda, así como reducir el consumo para calentar la misma.
En este sentido, el techo se trata de la parte de la vivienda por donde más puede escapar el calor y el frío, por lo que tendremos que buscar el mejor aislante térmico para nuestra vivienda.
En primer lugar, a la hora de elegir el tipo de material o aislante durante el proceso de construcción de la vivienda, tendremos que tener en cuenta las variables meteorológicas del lugar. No es lo mismo si la vivienda estará en un lugar en el que hace mucho frío en invierno y mucho calor en verano, que otro en el que llueve mucho durante todo el año.
Otro aspecto que tenemos que tener en cuenta la hora de escoger el mejor aislamiento térmico, es si vivimos en un edificio de viviendas o en una casa unifamiliar, puesto que las necesidades de aislamiento no serán las mismas. Por otro lado, también tendremos que tomar una decisión sobre ello por las posibles repercusiones en la estructura de nuestra vivienda. Por último, debemos considerar si queremos realizar obras para el aislamiento térmico de nuestro hogar.
Dependiendo del tipo de actuación que ejecutes en tu vivienda (reforzar la envolvente del edificio, eliminar puentes térmicos, aislar paredes, techos y suelos), pero sobre todo dependiendo desde dónde vas a acometer la reforma (desde el exterior o desde el interior), el tipo de material aislante a escoger variará.
En el caso de los edificios, elegir actuar a nivel fachada exterior requerirá de una acción conjunta a nivel de comunidad y la aprobación de todos los vecinos ya que afectará a todo el conjunto de la vivienda. En el caso de la vivienda unifamiliar, ya no habría ese problema.
A diferencia de los aislantes exteriores, esta opción es mucha más económica y la gran ventaja es que se puede llevar a cabo de forma individual, sin necesidad de contar con la aprobación de los demás propietarios del edificio.
Otro tipo de aislamientos por el interior son la espuma de poluretano proyectada por el interior o sistemas de placas aislantes acabadas con revocos. También existen otro tipo de actuaciones de aislamiento térmico de fachadas por el interior. Consiste en el relleno de cámaras de aire, en los que pueden usarse diferentes tipos de materiales: corcho, celulosa, lana o roca de vidrio,etc,..
A la hora de elegir el tipo de aislante para nuestro hogar, deberemos tener en cuenta que debe presentar las siguientes características: