Azulejos de baño: ¿Se los ponemos?

Alicatar colocando azulejos de baño para evitar las humedades en las zonas «mojadas» de la casa es un trabajo que no está exento de complejidad. Va a haber que adaptar los azulejos a los distintos recovecos de las paredes, además de convertirse en una tarea costosa en cuanto a tiempo y dedicación. Lo mejor es siempre dejarlo en manos de un profesional que nos va a ahorrar tiempo y dinero ya que se aprovecharán al máximo los materiales y vamos a poder invertir nuestro tiempo personal en otras tareas mucho más provechosas desde un punto de vista individual.

Tipos de azulejos de baño

La primera decisión que deberemos tomar como clientes es la elección del azulejo que por sus características y, muy especialmente, por su diseño, se adapte mejor a las necesidades estéticas que tenemos en nuestra cabeza. Existen varios tipos de azulejos, pero los podemos agrupar en 3 grandes características:

Por su tono: Engloba a los azulejos según su color y tonalidad. Es una elección importante ya que dotará a nuestro de baño de una personalidad propia. La mayoría de profesionales, como en nuestro caso, le ofrecerán un amplio abanico de posibilidades basadas en un muestrario para que su elección sea rápida y cómoda.

Por su calibre: Está directamente relacionado con el tipo de azulejo, que puede ser Suave, Medio o Fuerte. Para interiores tales como baños o cocinas, el más utilizado es el suave puesto que es más fácil de limpiar, aunque es más rebaladizo que el Medio o el Fuerte. Deberemos tener en cuenta esta variable en nuestra elección.

Por su resistencia al desgaste: En este caso, los azulejos se agrupan en base a su resistencia al deterioro. La medida que se utiliza es el PEI (Porcelain Enamel Institute) y nuestra elección dependerá en gran medida de si va a recibir un uso intensivo o, por el contrario, vamos a utilizar ese azulejo para zonas poco transitadas.

La estética del azulejo

El tipo de acabado de los azulejos de baño será otra de las características a tener en cuenta en la elección de los azulejos. Estos acabados pueden ser: imitación de madera, barro, marmol texturado, marmol clásico, color, gresite, imitación de gresite, blanco o imitación de piedra.

Este tipo de acabado, unido al color y tono, van a ser las elecciones más estéticas del trabajo ya que van a definir la personalidad de nuestro baño dotándolo de una calidez determinada, algo muy búscado a la hora de acometer cualquier reforma. En baños con un marcado carácter de modernidad, tonos rojizos, verdes o azules suelen ser los más utilizados. Por contra, para baños más clásicos, el blanco con sus diferentes acabados suele ser un valor seguro, en especial para casas rústicas donde buscamos seguir una estética homogenea con el resto de la vivienda.

Colocación de azulejos, trabajo para profesionales

La parte más importante del trabajo de colocación de azulejos es la preparación de las paredes y superficies. Para llevar a cabo esta preparación va a ser necesario contar con los conocimientos y las herramientas adecuadas para no tener problemas de movilidad posterior de las baldosas.

Posteriormente se utilizará una de las dos principales técnicas de alicatado, denominadas de capa fina o de capa gruesa. En la técnica de capa gruesa, al basarse en una base de mortero, será dificil que los azulejos queden totalmente rectos. Por otro lado, esta es la técnica más rápida.

Por otro lado, podemos optar por la técnica de capa fina. En este caso, el acabado va a ser mucho más limpio, evitando desniveles en los azulejos ya que la base de esta técnica es el cemento-cola.

Si quieres que te realicemos un presupuesto sin compromiso para la reforma de tu baño puedes contactar con nosotros y te responderemos en menos de 48 horas.