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04/06/2022El primer consejo que podemos dar acerca de pintar el exterior de una casa es elegir la pintura adecuada. Existen diversas opciones, como las pinturas vinílicas, las de pliolite o las pinturas plásticas. Sigue leyendo para conocer las principales características de cada una.
Y no menos importante que seleccionar el tipo de pintura que mejor se adapta a tus necesidades, está la elección del color que más te motive. Así, frente al clásico color blanco, verás que existen alternativas menos convencionales con muchos atractivos. Las exploraremos en la segunda parte de este artículo.
Pintar el exterior de una casa: Eligiendo la pintura adecuada
A continuación vamos a ver al detalle los tipos de pintura que, a nuestro juicio, son las más demandadas para pintar el exterior de una casa. Nos centraremos en:
- Pintura acrílica vs vinílica.
- Pinturas de pliolite.
- Pinturas con resina de silicona.
- Pintura elástica.
- Pinturas de silicato.
¿Pintura acrílica o vinílica?
Las pinturas acrílicas y vinílicas tienen en común que ambas resisten bien el agua, ofrecen un secado rápido y son fáciles de limpiar. También son prácticamente inodoras. Sin embargo, las similitudes terminan aquí.
La pintura acrílica tiene la ventaja de que es más versátil, pudiendo usarse en distintos tipos de superficies, incluidos metal y madera. Sin embargo, la vinílica presenta una mayor resistencia al sol y los cambios de temperatura, lo que la hace más adecuada para pintar el exterior de una casa.
Por lo tanto, aunque ambos tipos de pintura ofrecen buenos resultados sin son expuestas a la intemperie, las vinílicas que ofrecen mayor grado de protección en estos ambientes. Además, aunque resultan más caras, también están disponibles en una mayor gama de colores.
Pinturas de pliolite
Este tipo de pinturas se basan en un tipo de resina similar al caucho sintético. Se caracterizan por su gran resistencia al agua, la alcalinidad y salinidad, al sol, a climas secos y cualquier tipo de inclemencias extremas. Además, son al mismo tiempo impermeables y transpirables.
Pero si por algo destacan es por su enorme durabilidad y fortaleza frente a la degradación. De hecho, ofrecen una garantía media de 13 años. Otro aspecto a su favor es que debido a su potente capacidad de adherencia no suelen necesitar imprimación previa.
Pintar el exterior con resina de silicona
Las pinturas de resina de silicona pasan por ser una elección excelente para casas construidas en climas húmedos. El motivo es que crean una película microporosa sobre la superficie que repele el agua.
Aparte de pintura como tal, disponible en distintos colores, también la puedes encontrar transparente. Gracias a esta propiedad se puede usar como aislante hidrófugo incoloro, ideal para proteger muros de ladrillos, piedra u hormigón respetando su coloración original.
Por lo tanto, se trata de una opción muy a tener en cuenta para evitar la aparición de manchas de humedad, hongos, hollín y polvo.
Pintura elástica
Si lo que necesitas es pintar el exterior de tu casa con un producto que recubra grietas y porosidades, esa es la característica principal de las pinturas elásticas. También se conocen como pinturas elastoméricas, y sus propiedades elásticas provienen de los polímeros que las componen.
Por supuesto, también protegen de la lluvia y la abrasión, y son válidas para aplicar sobre yesos, hormigones, ladrillos y estucos. Asimismo, las pinturas elásticas resultan bastante económicas.
Eso sí, aunque son versátiles, no son la mejor opción para condiciones demasiado extremas. Pero pintar el exterior de una casa con ellas provee excelentes resultados en climas suaves.
Pinturas de silicato
Pintar el exterior de una casa con pinturas de silicato, o al silicato, otorga propiedades hidrófugas y buena durabilidad. Se suelen utilizar en edificios históricos y casas antiguas tanto para proteger como conservar la apariencia original de este tipo de construcciones.
Su grado de adherencia en superficies de ladrillo u hormigón es igualmente destacable. Esta capacidad de fijación se debe a su base mineral y el aglutinante que incluyen, llamado silicato potásico. Su resistencia a la contaminación también es buena.
Algunos consejos para elegir el color
Más allá de los colores tradicionales, debes saber que existe un mundo de colores ahí fuera. Salirte de lo establecido y elegir un color exótico para pintar el exterior de tu casa puede darte buenos resultados si lo haces con cierto sentido de la estética. Y, por supuesto, si no te da miedo arriesgarte, puedes mejorar de manera considerable el atractivo de tu casa y deslumbrar a tus vecinos.
¿Pintar el exterior de una casa de blanco o apostar por colores más atrevidos?
- La primera recomendación que podemos dar es que tengas en cuenta el entorno de la casa como si fuera un lienzo paisajístico. Eligiendo una composición de colores adecuada, tu vivienda se integrará perfectamente en el cuadro y será bien acogida por el vecindario.
- Considerar la gama de colores más propia de cada estilo arquitectónico también resultará de ayuda. Es una buena manera de lograr que tu casa cuente con el beneplácito de los expertos en diseño. Incluso existen Apps que te orientan para elegir el nuevo look de tu casa.
- Otra opción interesante es darle una vuelta de tuerca al clásico color blanco y combinarlo con aleros, marcos de ventanas o revestimientos de las puertas en otros tonos. Así, si tu casa está en un entorno soleado, no perderás los beneficios del color blanco a la hora de repeler la luz solar. Y al mismo tiempo tendrás una vivienda con carisma.
- En un estilo totalmente opuesto al anterior, los colores oscuros en fachadas le darán nobleza y elegancia a tu vivienda. Y con la llegada al mercado de nuevos materiales dotados de tecnología termo-reflectante, pintar el exterior de una casa con tonos oscuros ya no tiene que implicar, necesariamente, que estos absorban la radiación solar.
- Una alternativa a medio camino entre el color blanco y los negros o grises, son los colores tierra. Beige, ocres, cremas y marrones transmiten calma y sofisticación a partes iguales. También aportan cierto aire rústico. Las posibilidades cromáticas y las combinaciones son variadas.
- Y para los más osados están los que se conocen como colores vibrantes. Sin duda, optar por un azul intenso, un amarillo chillón, un mostaza o un violeta le darán un toque de vitalidad y originalidad a tu vivienda.